6 medidas de seguridad para proteger chalets

Las viviendas familiares son, según los datos que manejan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, las más propicias a sufrir robos.

Muy especialmente los chalés, ya que basta con superar la valla o el muro que delimita y protege la parcela para tener acceso a un buen número de puertas y ventanas desde la que adentrarse en el inmueble.

Algo que conocen perfectamente los amigos de lo ajeno, quienes suelen aprovechar los periodos de vacaciones para allanar y desvalijar aquellos chalés que, a sus ojos, cuentan con menos o peores medidas de protección.

Por ello, y porque cada vez son más las bandas profesionalizadas que deciden actuar, no solo cuando los propietarios abandonan la vivienda, sino también cuando se encuentran dentro, es fundamental implementar las máximas medidas de seguridad para proteger tu chalé.

Medidas de seguridad para proteger chalets

De igual forma que los ladrones van perfeccionando sus técnicas de asalto, lo van haciendo las medidas de vigilancia y seguridad de viviendas.

Y es que son muchos los mecanismos y dispositivos de los que te puedes servir, tanto para disuadir a los ladrones, como para prevenir que, en caso de acceder a tu propiedad, se salgan con la suya.

Veamos, pues, qué puedes hacer para convertir tu chalé en un fortín inexpugnable para las bandas de delincuentes.

Instala un control de acceso

Una de las medidas con las que debería contar todo chalé es con un buen control de accesos. Eso incluye, desde la instalación de un sistema de vigilancia a través de cámaras de seguridad, hasta la colocación, tanto en la entrada principal como en el punto de acceso a la vivienda, de un software de acceso con huella.

Cambiar las puertas por puertas blindadas

Si todavía no dispones de una, lo primero que tienes que hacer para impedir que los ladrones entren como si nada a tu chalé es cambiar tu actual puerta por una blindada de máxima seguridad.

De esta forma estarás protegido frente a los ataques de los profesionales del robo y el asalto.

Coloca una cerradura anti bumping

Cambiar la puerta por una blindada o acorazada es fundamental, pero no suficiente. Esta debe incorporar una cerradura anti bumping que impida que los ladrones introduzcan una llave maestra y, tras darle unos golpes y dañar su interior, acaben abriéndola.

Esto es, evitar que funcione el método bumping.

Pon rejas en ventanas

Las ventanas son, tras las puertas, el punto de acceso preferido de los delincuentes para adentrarse en las viviendas.

A diferencia de lo que ocurría hasta hace muy poco, hoy en día es posible elegir entre un sinfín de modelos de rejas de seguridad para ventanas que se integran perfectamente con el estilo y la arquitectura del chalé.

Instala persianas de seguridad

Uno de los puntos débiles de muchos chalés, en tanto en cuanto están protegidos con persianas endebles de fácil apertura, es el acceso al trastero o al garaje.

Para evitar que los amigos de lo ajeno se cuelen por este acceso lo mejor es instalar persianas de seguridad. Estas pueden ser:

  • Metálicas.
  • De aluminio.
  • Enrollables.
  • Motorizadas.
  • Eléctricas.
  • De PVC.
  • De plástico.

Si lo que buscas es blindar de arriba a abajo tu chalé, nada como contratar un servicio de vigilancia y seguridad profesional que:

  • Esté conectado 24/7/365 a una central receptora de alarmas.
  • Incluya un sistema de videovigilancia con reconocimiento facial.
  • Incorpore sensores de movimiento y detectores de temperatura corporal.
  • Alerte a vecinos y viandantes de una intrusión a través de una señal acústica.
  • Brinde asistencia inmediata en caso de emergencia.
  • Ofrezca la posibilidad de ver en tiempo real y a través de una app móvil todo lo que ocurre tanto en el interior como en el exterior del chalé.

Además de servirte de los elementos de vigilancia y seguridad más avanzados, para proteger tanto a tu chalé como a tu familia te recomendamos que sigas una serie de consejos como:

  • No colocar árboles cerca de balcones y ventanas que faciliten el acceso a los intrusos.
  • Mantener plantas y arbustos podados y arreglados para impedir que los intrusos se escondan en ellos.
  • Contar con un buen sistema de iluminación que permita ver con claridad la totalidad de tu parcela durante las horas de ausencia de sol.
  • Instalar un sistema de iluminación y riego automático que se active y desactive a lo largo del día para despistar a los posibles intrusos.
  • Esperar a que la puerta de acceso se haya cerrado por completo antes de abandonar el chalé.
  • Informar a la policía en el caso de detectar algún desconocido merodeando las inmediaciones de tu propiedad.

Si implementas todas estas medidas de seguridad y sigues las recomendaciones sugeridas en este post es muy probable que consigas que los ladrones, al ver tu chalé, acaben pasando de largo y busquen otros objetivos más asequibles.

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