Tal y como refleja el informe de Europa Ciudadana ‘El acceso a la vivienda en España: ¿Qué hacer con el problema de la ocupación?’, el número de denuncias presentadas en España por ocupación ilegal de viviendas no deja de aumentar, año tras año.
Como consecuencia de ello cada vez son más los propietarios de inmuebles que tratan de implementar medidas de seguridad destinadas a proteger su hogar y a todos los que lo habitan.
Y es que, por suerte, son muchas las acciones que pueden llevarse a cabo para evitar que los okupas accedan ilegalmente a una casa. Para muestra, 23 botones.
Para evitar que tu casa sea ocupada debes:
Disuadir a los okupas de entrar a la vivienda, por ejemplo, haciendo ver que está siempre ocupada o instalando paneles informativos que alerten de la presencia de un sistema de protección del hogar.
Instalar una serie de elementos de protección del hogar como, por ejemplo, cámaras de videovigilancia, sensores de movimiento, puertas blindadas, cerraduras antibumping o barrotes para ventanas.
En el caso de que, pese a todos tus esfuerzos, los okupas consigan acceder a la vivienda será capital demostrar que no han pasado más de 48 horas desde su entrada, ya que de lo contrario la policía necesitará de una orden judicial para poder actuar.
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Disuadir a los okupas de entrar a la vivienda
Los okupas solo acceden a propiedades abandonadas o desocupadas, por lo que si logras hacerles creer que tu vivienda está siempre ocupada acabarán cambiando de objetivo.
Para conseguirlo te recomendamos que:
- No reveles a ninguna persona ajena a tu círculo más íntimo qué días estaréis de vacaciones.
- Evites realizar publicaciones en las redes sociales a tiempo real sobre tus vacaciones.
- Dejes el buzón de correspondencia vacío de antes de irte.
- Dejes el jardín en perfectas condiciones antes de marcharte.
- Dejes alguna persiana sin bajar.
- Dejes alguna prenda de ropa vieja sin recoger del tendedero y algún que otro elemento de uso cotidiano como un vaso o un plato que haga entender que será recogido en breve.
- Instales un sistema de iluminación programable o que te permita controlarlo en remoto a través del teléfono móvil.
- Instales un sistema de riego programable o que te permita controlarlo en remoto a través del teléfono móvil.
- Avises a un vecino de confianza para que recoja la publicidad de debajo de la puerta y recoloque el felpudo cada vez que el servicio de limpieza lo mueva para llevar a cabo sus labores.
- Coloques paneles disuasorios (tengas o no tengas contratado un sistema de alarma), ya que está demostrado que 9 de cada 10 intrusos rehúsa actuar en viviendas protegidas con alarmas.
- Coloques carteles que avisen de la presencia de perros que hagan pensárselo dos veces a los okupas.
Ocupar tu vivienda
Como hemos comentado anteriormente, los okupas rehúsan ocupar propiedades en uso, por lo que basta con dejar la vivienda ocupada para evitar que entren. Así que:
- Intenta alquilar tu segunda vivienda durante los meses en los que no vas a darle uso.
- Trata de alquilar tu primera vivienda durante los días que tienes previsto estar de vacaciones.
- Presta tu vivienda a un familiar o amigo para que se quede allí hasta que vuelvas.
- Pide a algún familiar o amigo que, al menos una vez al día, entre a tu casa para realizar pequeños cambios que hagan ver desde el exterior que esta sigue ocupada.
Instalar una serie de elementos de protección del hogar
Cuanto más difícil se lo pongas a los intrusos, mayor será la probabilidad de que acaben cambiando de objetivo. Esa es la razón por la que te aconsejamos:
- Instalar una puerta blindada que responda de forma efectiva ante cualquier ataque.
- Instalar una cerradura antibumping que impida el acceso a través del método de apertura de puertas preferido de los delincuentes.
- Instalar rejas y/o barrotes en ventanas que imposibiliten el acceso a los delincuentes.
- Fijar las persianas con un seguro que impida moverlas desde el exterior.
- Bloquear los accesos de las puertas correderas situadas en patios y/o terrazas.
- Contratar un servicio de vigilancia del hogar que cuente con cámaras de videovigilancia conectadas a una Central Receptora de Alarmas, sensores de movimiento y alarmas sonoras que se disparen en caso de intrusión.
- No dejar la llave de emergencia escondida en el buzón, bajo el felpudo o dentro de una maceta, ya que se trata de escondites demasiado previsibles para los delincuentes.
- Dejar una copia de la llave a un vecino de confianza o a un familiar para que, cada vez que pueda, se acerque a tu casa a comprobar que todo está tal y como lo dejaste.
Como solemos decir en Servihogar, el coste de cualquier elemento de protección del hogar se amortiza evitando el primer problema. Cuenta con nuestro grupo de cerrajeros 24 horas en Valencia para proteger tu hogar con las cerraduras de puerta e instalación de rejas y persianas más confiables.